No mentía, no, la señora presidenta del Consell de Festes, cuando dijo aquello de que iban a traer "actuaciones de segunda o tercera fila " a la Fira d'Onda...
A un mes escaso del comienzo de las fiestas de octubre, la institución taurina, perdón, festiva, no ha sido capaz más que de confirmar un único concierto: el de la pasada de moda y ya arcaica Rosa Despaña.
Que un pueblo como Onda, que cuenta con un presupuesto municipal tan amplio, vea como se menosprecia a los aficionados a la música, recortando la aportación a los conciertos, mientras se llena el programa de astados, no tiene nombre.
No recuerdo un programa de la Fira con una programación musical tan pobre, tan baja y sobre todo, tan tardía.
Eso sí, toros, 24, como el reloj de Jack. Y no de poco nombre: Miura, Gabriel Rojas, Concha y Sierra y otros que harán las delicias de los aficionados, que los hay, y que también se merecen unas fiestas de lujo.
Pero no deberían ser los únicos, digo yo...
Si el consell saliera del coso donde hacen sus cábalas, hablaran con la gente, preguntaran qué les parece la cantidad de toros, la escasez de oferta musical y la inexistencia de alternativas para los que, ya que no les gusten, que somos muchos, sino que pese a disfrutar con ellos, ven con sorpresa como lo único que importa es cuantos cuernos pasean por el centro del pueblo en esa semana.
No me extraña que cada vez sean más los ondenses, que, hartos de aburrirse, opten por cogerse la semana de Fira de vacaciones y desaparezcan de las calles llenas de casales cada vez menos llenos y más horas cerrados.
En fin...
Pasearemos, haremos fotos varias, veremos como los accesos al recinto taurino, un año más, están vedados a los que van en sillas de rueda, a los carritos de bebé, pese a que no hayan programadas exhibiciones (cosa rara), y un año más, escucharemos que tantos toros son demasiados, y comprobaremos que eso, al Consell, le importa... un cuerno.
Un saludín
A un mes escaso del comienzo de las fiestas de octubre, la institución taurina, perdón, festiva, no ha sido capaz más que de confirmar un único concierto: el de la pasada de moda y ya arcaica Rosa Despaña.
Que un pueblo como Onda, que cuenta con un presupuesto municipal tan amplio, vea como se menosprecia a los aficionados a la música, recortando la aportación a los conciertos, mientras se llena el programa de astados, no tiene nombre.
No recuerdo un programa de la Fira con una programación musical tan pobre, tan baja y sobre todo, tan tardía.
Eso sí, toros, 24, como el reloj de Jack. Y no de poco nombre: Miura, Gabriel Rojas, Concha y Sierra y otros que harán las delicias de los aficionados, que los hay, y que también se merecen unas fiestas de lujo.
Pero no deberían ser los únicos, digo yo...
Si el consell saliera del coso donde hacen sus cábalas, hablaran con la gente, preguntaran qué les parece la cantidad de toros, la escasez de oferta musical y la inexistencia de alternativas para los que, ya que no les gusten, que somos muchos, sino que pese a disfrutar con ellos, ven con sorpresa como lo único que importa es cuantos cuernos pasean por el centro del pueblo en esa semana.
No me extraña que cada vez sean más los ondenses, que, hartos de aburrirse, opten por cogerse la semana de Fira de vacaciones y desaparezcan de las calles llenas de casales cada vez menos llenos y más horas cerrados.
En fin...
Pasearemos, haremos fotos varias, veremos como los accesos al recinto taurino, un año más, están vedados a los que van en sillas de rueda, a los carritos de bebé, pese a que no hayan programadas exhibiciones (cosa rara), y un año más, escucharemos que tantos toros son demasiados, y comprobaremos que eso, al Consell, le importa... un cuerno.
Un saludín
Comentarios
Por otro lado aqui en Vila-real, los conciertos tampoco es que fueran para morirse (salvo los lolailos de Estopa) y la gente comentaba que era ridiculo los toros y las ganaderias traidas a Vila-real.
En fin.
En el consell me han llegado a decir que hay tantos toros, porque "vienen muchos aficionados de otros pueblos".
Lo que viene a decir que importan más los aficionados de otros pueblos que los ondenses.
Así nos va...
Al Consell sólo le importan los toros, lo demás no les importa un pito.
Y el caso es que cada vez más gente protesta por esos abusos, aunque lo hace con la boca pequeña, y los del Consell, que son de oído duro, no les llegan a oir.
Un saludín