UNA PEQUEÑA (Y BARATA) JOYITA

Hace ya algún tiempo, cuando eso de los vídeos era algo que tenían sólo dos tipos de personas (los que tenían mucho dinero y los dueños de las tiendas de electrodomésticos), me colé en una de estas tiendas para poder ver una película que, ¡oh, sorpresa!, no estaba siendo emitida en ese momento, sino que estaba almacenada en una gran cinta que se reproducía gracias a un enorme aparato...
La película era LA GUERRA DE LOS MUNDOS, y como puedes imaginar, no se trataba de la de Tom Cruise.
El caso es que poco a poco, el grupito de niños que asistíamos a las proyecciones improvisadas en la tienda fue creciendo, y la variedad de películas (creo que en la tienda habían alrededor de cuarenta películas) aumentaba.
Una de esas veces, Amando, hijo del propietario, y actúal gerente de la tienda, nos puso una película de dibujos de Superman. Después de haber visto esa maravilla que fue la película, nos impresionó.
No era un Superman que nos resultara conocido. No se parecía en nada al de los cómics, ya que tenía el símbolo del pecho bastante diferente. No era un diamante amarillo, sino un triángulo invertido de color negro. Además, para disgusto de los espectadores, era bastante flojito. Todo el mundo parecía ser capaz de darle una tunda, o al menos, de ponerle las cosas difíciles a la hora de salvar a Lois, siempre metida en líos.
Años más tarde, descubrí que esas breves peliculas eran todo un hallazgo.
Los cortos, emitidos durante los años 1941 al 1943, eran obra de los hermanos Fleisher, verdaderos genios de la animación de aquellos tiempos.
Las historias tenían ese sabor a películas de aventuras de la época, con los correspondientes científicos locos, robots asesinos, seres extraterrestres y demás parafernalia propia de las novelas pulp.
En cuanto a la estética, no hay más que ver las recientes series de Batman, Superman o la LJA para ver cómo han influído estas películas, y cual es la añoranza y el buen recuerdo que traen a los actúales encargados de animar a los personajes DC.
Ya tuve la ocasión de comprar, por algo así como 100 pesetas un vídeo con cuatro o cinco episodios de esta serie, hace unos años.
Ayer, en el Carrefour de Vila-Real, me encontré con dos DVDs que recopilaban toda la serie. Se trata de una colección de tres títulos, así que todavía me queda uno por encontrar. No creo que sea difícil.
El caso es que cada uno de ellos me costó la friolera de 1 (un) euro.
Es sorprendente como algo que los aficionados valoramos tanto, para el gran público sea material de relleno, carne de reediciones de "a duro". Y mira como me alegro yo...
En los USA, pais donde saben sacar los cuartos a los aficionados, ha salido una edición de lujo, con copias del Action Comics número 1, a un precio, pues eso, de coleccionista...(mentira. Es casi de risa)
Mientras estos distribuidores no se den cuenta de lo que nos gustan estas cosas, seguiremos disfrutando de pequeñas joyitas, a un precio de risa.
Que lo disfrutemos.

Un saludín

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