Batman en Barcelona


Ya he tenido ocasión de leer el cómic que llevaba al Cruzado Enmascarado hasta la Ciudad Condal. Y aparte de conceder a David Macho el mérito de coordinar semejante trabajo (el cómic apareció de manera simultánea en Estados Unidos, España e Italia el mismo día, el día en que inauguraron el Saló del Còmic), poco más hay que comentar sobre él.
Mark Waid construye una história típica de Batman, con un argumento que no destaca precisamente sobre otras, ni aporta nada nuevo a lo que leemos. Con esto, es una historia que se deja leer sin problemas y cumple sobradamente la misión para la que fue creada: entretener.
Pero el punto fuerte de este cómic no es el guión, sino la ambientación.
Diego Olmos nos transporta a la Barcelona del 2009, la que podemos visitar hoy mismo, y lo hace de manera correcta.
Demasiado, quizás.
Y es que el realismo y la minuciosidad con que retrata a la ciudad, casi roba protagonismo a los personajes "de carne y hueso" que aparecen en la historia. No es que sea malo, al fin y al cabo, porque consigue que no se ralentice la acción. Aún así, no me acaba de convencerel tebeo en sí.
Si no es el guión, ni el dibujo, ni el color (de Marta Martínez, también muy trabajado y que me parece de lo mejor que tiene el álbum) ¿qué es?.
Tampoco creo que sean las incoherencias que presenta la trama (¿los mossos d'Esquadra no conocena Batman? ¿No existe la JLA en ese tebeo? ¿Cómo atraviesa Killer Croc el charco en 24 horas? ¿Le dejan subir en un avión porque no lleva nada metálico?). Eso, en un tebeo de superhéroes, ya ni se mira. Y hasta se perdona.
Tampoco es que el tebeo sea una (otra) incursión de la ciudad en los medios de comunicación de masas, versión ficción, que tiene su cosa y desde luego, ahí cumple con su función publicitaria. Si en la versión española tiene hasta un prólogo del alcalde de Barcelona...
Entonces, repito, ¿qué es?
¿Qué es lo que no me acaba de convencer de este tebeo?
Pues quizás sea lo anodino que es, que sea una historia más, que no tiene más que unos escenarios mucho más bonitos que los habitúales, sin perder el alma gótica de la ciudad original del Murciélago. Quizás sea ese ánsia que les ha entrado a todos por hacernos pasar una historieta más de Batman como algo especial, sólo porque transcurre en Barcelona.
Si es por eso, los X-Men visitaron Valencia, los Vengadores pasarán por Zaragoza y mientras hayan dibujantes españoles en los USA, tendremos partes de este nuestro país por las grandes editoriales americanas.
Así que, desde luego, y dejando aparte la labor de los implicados en la realización del tebeo, correcta y laboriosa por el tema de la coordinación entre las dos editoriales, poco tiene que aportar.
Excepto, claro, una nueva aventura de Batman.
Un saludín

Comentarios